La nostalgia es ese sentimiento que irrumpe en nuestro cerebro como un álbum de fotos que de repente se cae de la estantería, ‘obligándonos’ a volver a esos momentos de juventud, felicidad, alegría, amistad… (tendemos a guardar fotos sólo de lo bueno). Un sonido, un aroma que se cuela por los poros de la piel, y nos hace sonreír, por lo que pasó o no, por el tiempo transcurrido. Es un momento de ‘tristeza’ (quién sabe qué significa esta palabra exactamente) que enamora, que te devuelve a un lugar muy lejano para convertir el presente en algo tan real que merece la pena vivirlo. Sí, la nostalgia también es belleza. Al menos a mí me lo parece.

Nostalgia. de uhhhlaine

¿Y por qué digo todo esto? Porque no me puedo resistir a la nostalgia. Sí, ya sé que esto es un blog de belleza. Pero es que hoy, no sé cuántos años después (diría que desde mi infancia) he vuelto a oír  al afilador. Pensaba que era algo del pasado, ya caducado. O de zonas alejadas de grandes urbes. Por ejemplo, en la casa de la playa donde disfruto los veranos, oigo de vez en cuando al tapicero. «Ha llegado a su casa...». Pero el afilador ha pasado por la misma puerta de mi casa en Madrid, no es la Puerta del Sol pero tampoco el más allá. Y me ha entrado un ‘no sé qué’.

Esa musiquilla tan característica, «el afiladooooooor…« Eso sí, cuando yo era pequeña iban en una motocicleta, con la piedra adaptada al manillar. Era una delicia ver cómo daba vueltas aquello (entonces no teníamos ‘play’) y saltaban chispas al paso de un enorme, o pequeño, cuchillo.

Men at work de Reynosa Blogs

Hoy era una furgoneta y no sé si llevaría piedra o actualmente se afilan los cuchillos con tecnología de última generación… Pero el soniquete de «el afiladooooooooor…» y su armónica no han cambiado. Y como soy una nostálgica no he podido evitar escribir un post y buscar alguna foto del recuerdo.

Pero además, estoy segura que esa sensación de plenitud que me ha invadido por unos instantes recordando en una imagen toda una época, ha provocado una explosión de endorfinas, hormonas de la felicidad, e impedido la formación de nuevas arrugas.  Así que hoy, como ayer, igual de joven y bella.